Así que me vino al pelo pues tenia para estrenar la nueva sartén de pyrex attraction"de la cocina a la mesa" Esta serie es una batería de cocina, con un mango extraible para cocinar y dos asas para servir y presentar en la mesa. Estas sartenes son ideales para cocinar, servir y también para almacenar. Ademas este modelo al ser mas alto y tener tapa es perfecto para hacer sofritos, guisos, un pisto e incluso para preparar un buen arroz. La gama Pyrex Attraction es una gama perfecta para los amantes de la cocina.
- 1/2 kilo de almejas
- 1 diente de ajo
- 1 cebolla (100 gr.)
- 1 cucharada sopera de pan rallado
- 1/2 vasito de agua
- 1/2 vasito de vino blanco
- 1 hoja de laurel, 2 bolitas de pimienta negra, perejil fresco
- 3 cucharadas soperas de aceite y sal
- unas gotas de zumo de limón
Cuando compremos las almejas las lavamos bien y las ponemos en un recipiente con agua y sal, para que suelten si tienen algo de arena. Si sueltan mucha arena, volver a cambiarles el agua con sal. Sacar y escurrir cuando las vayas a utilizar.
En una cazuela ponemos las almejas, la hoja de laurel y medio vasito de agua. Llevamos a ebullición para que se abran las almejas, una vez se abran las vamos sacando a una fuente y reservamos. Si quieres una vez frías puedes retirar la concha vacía.
Picar menudo 1 diente de ajo y la cebolla.
En una sartén antiadherente ponemos el aceite a calentar, cuando este caliente añadimos el ajo removemos y a continuación la cebolla, poner un poco de sal y sofreír a fuego muy suave tapando la sartén, hasta que tengamos la cebolla transparente y bien pochada.
Cuando tengamos la cebolla hecha ponemos una cucharada sopera de pan rallado, removemos bien y añadimos entonces el vino blanco y dos bolitas de pimienta negra.
A continuación añadimos a la sartén las almejas, la hoja de laurel unas gotas de limón y el caldo de abrir las almejas (con cuidado para que no caiga nada de arena si es que la han soltado, lo mejor es pasar el caldo por un colador de tela).
Dar un hervor a todo unos minutos moviendo la sartén en vaivén y añadirle un poco de perejil fresco picado.
Disfrutar de una simple receta que no deja a nadie indiferente.
Nota: hay quien prefiere no encontrar nada de cebolla, así que puedes hacer el sofrito con cebolla triturada o mejor aún, triturar la cebolla después de tenerla pochada para mi gusto esta mas rica.
Fuente: Simone Ortega